Magnífico ejemplar que reúne dos ediciones originales mayorees de Bossuet
encuadernado en piel roja de marroquín de de la época.
París, 1731.
Bossuet. Tratados sobre el libre albedrío y la concupiscencia. Obras póstumas (dado por Jacques-Bénigne, sobrino).
París, Barthélémy Alix, 1731.
2 partes en 1 volumen en duodécimo de 26 pp., (3) ff. de índice, 155 pp., (1) f.bl., (1) f. de título, 218 pp., (6) ff. Encuadernado en plena piel roja de marroquín de la época, filete en frío enmarcando las tapas, lomo con nervaduras ricamente adornado, con ruedecillas fleurdelisadas en pie, filete dorado en los bordes, ruedecilla dorada interior, cantos dorados sobre marmolado. Encuadernación de la época.
168 x 94 mm.
Edición original de dos tratados mayores de Bossuet.
Biblioteca de Backer, n°998; Boletín Morgand et Fatout, n°129; Rahir, La Biblioteca del amateur, 336; Tchemerzine, I, 905; Brunet, I, 1139.
Bossuet fue nombrado preceptor del Delfín en 1670 y el Tratado sobre el libre albedrío es una de las obras compuestas para la educación del futuro soberano.
El tema abordado trata del ‘modo de conciliar nuestra Libertad con la certeza de los decretos de Dios’. La cuestión sobre si existen elecciones humanas independientemente de la suprema gracia de Dios acababa de dividir a los católicos de Francia en dos campos: los jesuitas, apoyados por el alto clero así como por el Rey, y los jansenistas de Port-Royal, minoritarios pero unidos alrededor de brillantes autoridades teológicas e intelectuales como Arnault y Pascal. Ahora bien, los años que vieron a Bossuet como preceptor del Delfín coinciden casi exactamente con la Paz de la Iglesia de Francia (1668-1678). Además, los jansenistas fueron de las pocas personas que no entraron en conflicto con Bossuet, aunque su situación en la Corte no le permitía mostrar demasiado interés en la teología de Port-Royal.
Así que la riqueza del Tratado sobre el libre albedrío reside principalmente en la síntesis frágil pero valiente (de todos modos es al futuro Rey de Francia a quien Bossuet se dirige), de dos doctrinas que no obstante son ferozmente opuestas. Este texto poco conocido ofrece una medida muy precisa de un periodo de tolerancia oficial pronto vencido por la rigidez de las libertades en materia de religión.
Le Tratado sobre la concupiscencia, compuesto alrededor de 1693, refleja por su parte la época siguiente, período turbulento donde las posiciones doctrinales son mucho más rígidas y las costumbres mucho más libres. Obispo de Mêux desde 1681, escuchado por la corte que se desplaza de París y de Versalles para sus prédicas, doctor incontestable de la Iglesia de Francia, Bossuet aquí se enfrenta a los libertinos, a los mundanos, vituperando contra la mentira de su mente y la vanidad de su vida. Este texto debía titularse Consideraciones sobre las palabras de San Juan: ‘No améis al mundo’ pero el sobrino de Bossuet, obispo de Troyes y prefaciador de esta edición, prefirió el otro título, más severo.
El vínculo con Versalles se mantuvo hasta el final de la vida de Bossuet. Ocupaba un lugar esencial en el seno de la corte de Francia, era consejero del Rey en sus consejos y consejero ordinario en sus consejos de Estado.
Magnífico ejemplar, particularmente fresco y grande de márgenes (altura: 168 mm), conservado en su encuadernación de marroquín rojo de la época de una calidad rara.
Las ediciones originales de Bossuet conservadas en marroquín de la época siempre han sido buscadas por los bibliófilos.
